Probablemente estás aquí porque vas a comprar tu primera cinta de correr y no sabes por dónde empezar. ¡Tranquilo/a, para esto estamos nosotros! Vamos a darte las claves para que puedas comprar una cinta de correr barata, pero a la vez funcional y adaptada a tus necesidades para que no gastes un solo euro de más.
¿Merece la pena comprar una cinta de gama de entrada?
La respuesta corta es sí. Si es tu primera cinta y tan sólo quieres empezar a entrenar o mantenerte en forma, sin aspirar a competir o con el objetivo de aumentar drásticamente tu rendimiento, no necesitas nada más. Adquirir un modelo de gama superior sería, sencillamente, tirar el dinero. Da igual el presupuesto que tengas, focaliza tus metas y sé realista en cuanto el uso que le vas a dar. Si va a ser una cinta de iniciación, de uso esporádico o no intensivo, con un modelo de gama de entrada es más que suficiente.
Muchas veces nos hacéis la típica afirmación/pregunta: ¿y si quiero un modelo profesional porque puedo permitírmelo? Adelante, pero siempre os responderemos con la misma comparación: puedes comprarte un Ferrari para transitar por un camino de cabras y estamos seguros de que tendrás uno de los mejores coches del mercado, pero por una octava parte de tu presupuesto habrías comprado un 4×4, un coche quizá más básico, pero sin duda mucho más adaptado y eficiente para lo que lo necesitas.
Por tanto, vamos a establecer una serie de preguntas que deberías formularte antes de buscar un modelo definitivo:
- Vas a utilizarla para caminar y quizá echar alguna carrera de forma esporádica.
- Quieres iniciarte en el mundo del running pero no quieres correr en la calle y no sabes si realmente te gusta.
- En total, será utilizada 2 o 3 veces por semana a ritmos por debajo de 12 km/h y durante menos de una hora en cada sesión.
- Tu presupuesto máximo es de unos 300-350 euros.
- Tienes que realizar alguna tarea de rehabilitación y no quieres invertir mucho dinero.
- Dispones de un espacio muy reducido en el que instalar una cinta de correr.
- Tu peso corporal está por debajo de 100 kilos.
Si has respondido afirmativamente al menos a 3 de estas cuestiones, ésta es sin duda tu gama. Así que vamos con los siguientes puntos a valorar.
¿Qué características buscar en una cinta de correr de gama de entrada?
No debemos asociar una cinta de correr barata con que la idea de que sea una cinta mala. Como ocurre con todo tipo de artículos, las mejores siempre son más caras, pero podemos encontrar modelos económicos que, sin resultar pretenciosos, cubran perfectamente nuestras necesidades. Simplemente plantéate estos puntos para saber qué modelo elegir y economizar todavía más en su compra:
- Si no vas a correr de manera habitual y te dan igual las cifras, no persigues alcanzar una velocidad determinada ni te importa cuántos kilómetros harás en tus entrenamientos, la pantalla de información (llamada consola) es prescindible. En cualquier caso, es recomendable que incorpore al menos una pantalla sencilla, ya que te ayudará a planificar mejor los mantenimientos de la cinta.
- Aunque los modelos con inclinación no son los más frecuentes en esta gama, decantarse por uno que la ofrezca es una buena decisión. Las cintas de correr de esta gama suelen incorporar motores de baja potencia y la inclinación ayudará al motor a realizar menos esfuerzo, alargando su vida útil.
- La parada de emergencia es un extra que hoy por hoy incluyen casi todas las cintas con independencia de su gama. Te recomendamos que prescindas de él para ahorrarte unos euros, puede marcar una gran diferencia entre una simple caída y un grave accidente.
- Este tipo de cintas suelen ser bastante estrechas tanto a lo ancho como a lo largo. Asegúrate de que, por tu altura, no se te queda corta a la hora de elegir un modelo.